Don Carlos Julio fue gerente en Colombia de la Compañía Mundial de Seguros Cooperativos (Cuna Mutual) cuya casa matriz está en Wisconsin, Estados Unidos, y tiempo después, ocupó la gerencia de la oficina latinoamericana
Cuna Mutual lo pensiona a los 65 años, pero siguió trabajando. Ocupa los cargos de Director Ejecutivo de la Fundación Social de Coopdesarrollo, Fundesarrollo y asume la presidencia del Consejo Directivo de Cupocrédito.
En sus últimos años, se dedicó a vivir más tranquilo. A leer y a escribir sobre el sector, mercadeo, filosofía, sobre los principios y valores, vitales para cualquier dirigente cooperativo, y a practicar con sus amigos el deporte del golf, involucrando a su señora y a sus hijos.
Entre varios de sus pasatiempos, estaba la carpintería, “De hecho, mi papá construyó su propio taller en el patio de la casa y se dedicó a trabajar la madera para transformarla en objetos prácticos, útiles y decorativos, y también fue ingenioso y recursivo con los metales y el cuero” dijo Francisco, “Pacho”, su hijo diseñador.
Cuentan que era feliz viajando con Tránsito, su señora, los hijos y la familia. “Recordamos con mucha alegría varios paseos. Uno muy especial a Ecuador en bus; otro, en tren a Nemocón; al Centro Recreativo y Vacacional Cafam, en Melgar, y al apartamento de Cartagena.”
La labor social desarrollada por Carlos Julio fue reconocida por diversas personalidades y organismos de la vida nacional, que veían en él, un ejemplo como ser humano, como padre y un experto, conocedor profundo de la economía solidaria, social y cooperativa.
Ese referente, junto con la mística, entrega, compromiso y liderazgo para desarrollar el trabajo social, sumado a sus cualidades humanas como jefe, le hicieron merecedor de varios homenajes, distinciones y condecoraciones.
En julio de 1996 recibió por parte de la Cámara de Representantes de Colombia la Orden de la Democracia, en el grado de “Comendador”.
Ese mismo año, con mucha alegría y gratitud, celebró en su hogar, junto con su señora, hijos y otros integrantes de su familia, el aniversario número 41 de matrimonio, y su cumpleaños número 74. “Fue un evento lleno de lágrimas de emoción y alegría”.
Carlos Julio Niño Rodríguez, fallece el 29 de septiembre de 1996, en Bogotá.
“Nuestras acciones deben seguir el principio de no dejar de hacer el bien que es posible, y por tanto, obligatorio”. Carlos julio niño.
Un agradecimiento a sus hijos, cuñados, nietos, y hermanas por enriquecer esta biografía con sus testimonios.
Igualmente, a quienes muy juiciosos y consecuentes abrieron las páginas de los escritos de la familia: Teresa Benítez, libro Historia de la Familia Niño Rodríguez; Jorge Niño, árbol genealógico de la familia Niño Rodríguez; libro La Unión Hace la Historia, familia Niño Rodríguez, y Rosa Emma Niño Jiménez, con el libro Forjadores del Cooperativismo Colombiano, así como a Mauricio Niño Rodríguez y a Juan Carlos Montoya.
“Las horas más oscuras son aquellas que preceden al alba”.Rymel Serrano, habla de Carlos Julio Niño Rodriguez, su gran amigo, el “líder obrero” que le cambió su vida.